Ayer me deshice de la ropa como si de un gesto intuitivo se tratase, como una innegable metáfora de todo aquello que me pesa o me sobra. Me desnudé me quité cada trozo de tela que tapaba mi cuerpo, y lo dejé todo amontonado, en la entrada de una casa que me pesa, porque … los recuerdos me pesan, y, ese, mi hogar temporal, es un recuerdo más.


No hay reglas escritas sobre las intensidades, nadie puede decidir qué debe vivirse poco, nada o muy intensamente. Mi intensidad es sólo mía y no se cuestiona, yo la vivo yo me la trago.

Mi ropa en la entrada, arrugada de la rabia, empapada por la lluvia. El descanso necesario de una situación buscada, querida pero imposible, sí, imposible, pensé que esa palabra no estaba en mi diccionario pero... me equivoqué, una vez más.

Vetusta Morla - Al respirar

En mi interior. Marcado a fuego. Nada ha sucumbido a las horas. Se ha quedado pegado en mi cuerpo, tu sudor, tu olor, tus caricias, tu sexo. Cada susurro se repite… inconsciente con el paso del tiempo.

El sentimiento intenso se deshace, se olvida, lo que ponemos de cada una es limitado, finito. Sólo en la memoria quedarán los recuerdos  que sucumbirán al tiempo.

Pero serán recuerdos, mi ser no sucumbe recoge los frutos de su trabajo, camina airoso por su mundo creado, sin retroceder.

Ni contigo ni sin ti, es la frase más repetida en mi cabeza los últimos ... días? semanas?.

Cuando siento la indiferencia, el olvido, pienso que algo mucho más importante está en su cabeza y eso me calma y me ayuda a no pensar, a no sentirme mal.

La exclusividad no debería de existir, sobre todo, cuando hablamos de sentimientos.


El calor, ese que es capaz de lo peor y de lo mejor. Y lo digo con conocimiento de causa. La locura se acentúa, los impulsos se vuelven incontrolables, la paciencia desaparece y la gente está más irritable. Pero existe su parte buena, la playa, los baños que se suceden uno tras otro, la cervecita fresca, las conversaciones debajo de un árbol, a la fresca… El calor también hace mella en mí, pero no suele alterarme demasiado, creo que soy medio africana.

Bueno, pues en el estado de no alteración en el que me encontraba ayer, tranquilamente sentada en una terraza, observé escenas contrapuestas de las consecuencias de este tórrido calor. Desde el hombre que golpea el cristal de un taxi reclamándole al taxista quién sabe qué (observé la escena en la lejanía y sólo pude ver la acción, las palabras no me llegaron), hasta la mujer pasada de vueltas que se orina encima y comienza a soltar improperios a todo aquel que osa cruzarse en su camino.

El contrapunto, lo bueno que nos dan estas noches sureñas, son las calles llenas, la libertad de interactuar con el calor de la forma que más nos plazca. Con un cajón, una guitarra y buen ánimo, dos calles más arriba había quien le encontraba regusto a las noches de verano. Parecía que me había tele transportado al sur de la península, que por otra parte no hubiese estado nada mal. Quiero jugar a la brisca...  

Twittear, blogs, facebook, compartir, tags, post, me gusta, enlace … así ha sido el día de hoy, integrando un nuevo vocabulario y una nueva forma de entender las relaciones, las personales y las profesionales. Es una locura, pero es lo que tenemos entre manos, donde nos vamos a mover de aquí en adelante. 


Entre tanto me ha dado tiempo a leer esta entrevista a Sam Shepard, aquí dejo un pequeño estracto:

El País. La soledad es un tema recurrente en su obra. ¿Por qué?

SAM SHEPARD - Actor y dramaturgo:  Porque es la experiencia central de la vida moderna. Todos luchamos contra la soledad. Hay quien la elude buscando la seguridad de una familia, otros se rodean de gente. Yo escribo porque es una compañía constante. Llevo mis cuadernos a todas partes. Cuando escribo no me siento solo y necesito esa soledad para escribir. Es un conflicto sin solución.

(Entrevista completa)

Bonita noche la de ayer, no vi llamas, ni señales de humo, sólo un leve olor a quemado me recordaba que ayer fue la noche más corta. 


Kaiser Chiefs - Everyday I Love You Less and Less
Sentada en la terraza de un bar cualquiera podía ver su ventana. Esperaba inquieta, nerviosa, a que la luz se apagase, que el sueño no la atrapase en esa noche fría. El deambular de la gente disminuía según iban pasando las horas, el cielo oscurecía por momentos, los coches reducían su frecuencia. Una leve lluvia hacía acto de presencia, insuficiente para hacer mover su inamovible silueta. Su mirada fija en la ventana, mientras la luz encendida que sobresalía por los cristales daban un poco de vida a la noche ya … lluviosa.

Encendió un cigarro, la mano temblorosa apenas acertaba a llevar la llama a su objetivo. Aspiró el humo, dos caladas y lo apagó. Un rostro inconfundible asomaba entre la luz hacia la noche oscura. El nervio recorría el cuerpo de la figura inamovible, el corazón ya era el único sonido que se escuchaba hasta que el ruido del móvil le sacó de su estado, de su mirada fija en el objetivo. De entre las letras entresacó dos palabras…. TE ESPERO.

Suelo tumbarme con esta música de fondo Vetusta Morla - Los días raros. Esta canción me tiene hipnotizada, cómo va in crescendo, ¿no la escuchas?, que ganas de cantarla:

Aún quedan vicios por perfeccionar en los días raros, nos destaparemos en la intimidad con la punta del zapato ...

Siempre voy veinte, treinta ... (no sé cuántos) pasos por delante y ya me imagino, cantando, escuchando, disfrutando ... pero falta mucho, lo suficiente para que todavía sea pronto imaginárselo ...

Mientras tanto, voy a seguir aquí, tumbada, escuchando, con los ojos cerrados y mi sueños interrumpidos.

Cuando miro a mi alrededor, muchas veces pienso en las relaciones que nos rodean, en la gente que pasa por nuestra vida. Gente importante, algunas se quedan, de otras nos olvidamos y desaparecen de nuestro entorno. Gente con la que en un momento determinado conectamos, pero cuando nuestras circunstancias cambian … esa gente, también cambia y la sustituimos por otra.

Hablamos, nos hablan, contamos, nos cuentan, queremos, nos quieren, nos prometemos, nos prometen, deseamos y nos desean, todo eso, durante nuestros años, ¡nos pasa con tanta gente!. Es un bucle continuo, es una estabilidad temporal, que rompemos o que rompen, da igual quién sea el sujeto. Visto así, es un poco locura, pero me imagino que también es enriquecedor, ¿no?.

La verdad es que las relaciones humanas están llenas de sorpresas, de gratas sorpresas. La suerte es que pasan, a veces de largo, otras, sin embargo,se quedan. 

Estoy esperando a ver si llega mi inspiración que anda un poco aturdida y que se empeña siempre en recurrir al mismo tema, de preguntarse las mismas cosas y yo, ella no, ya estoy cansada de escribir casi siempre de lo mismo. Así que… inspiración, olvídate, hoy no tienes espacio en mi blog, hoy me voy a dedicar a inventar, a decir cosas sin sentido, que no se puedan relacionar.

Caminando despacio, por la noche que acecha, se escucha el silencio, y mi respiración de fondo…. (así no)
……
El sol deslumbra, nos ciega con su luz, el aire apenas corre … (que va, que va)
……

A través del cristal, pude ver un perfil conocido, me quedé pegada al escaparate, mirando, esperando descubrir el rostro de ese perfil. Suavemente, como a cámara lenta y mientras introducía monedas en un billetero, se iba dando la vuelta, despacio, primero el cuerpo y poco a poco su cabeza. En ese momento vi sus ojos, aquellos con los que había soñado, los que habían quedado tatuados en mi memoria y en lo más hondo de mis entrañas. Durante un breve instante de tiempo, coincidieron, esa milésima de segundo resultó eterna, removió mi interior que se descontroló, y subió hacia mis mejillas que en un gesto instintivo enrojecieron. Atrapada por ese mundo de sensaciones incontroladas, huí calle abajo, todavía con su mirada clavada, dentro, grabada …(creo que 'inspiración' se ha vuelto a colar)

Estos días quería haberme encontrado entre el tumulto, creo que no lo he conseguido. 

En respuesta a uno de los blogs que sigo: La novia de papá

No sé porqué cuesta encajar un desengaño, quizás porque en las historias que vivimos dejamos una parte de nosotras entre ilusiones, sensaciones, emociones y deshacerse de eso y asumirlo ... sinceramente, cuesta. 

Nadie está preparado para que algo en lo que has invertido energia no salga y nadie está preparado para asumir un no y hacer ipso facto borrón y cuenta nueva.

Como todo en esta vida requiere de tiempo y ese tiempo conlleva diferentes etapas, primero de lamento y de vacío, de negar la realidad y esperar una reacción, después de autovaloración y reafirmación así ... hasta que una asume que ya no, que ni te quieren, ni quieres, ni te necesitan ni necesitas pero... qué bueno que lo viviste. 

Así se hace borrón y cuenta nueva. Es el círculo continuo de esta vida. 




Repensando, rehaciendo, resurgiendo, reactivando, reprogramando, redescubriendo, reflexionando, reorganizando, reescribiendo…

Reconozco mi error, mi falta de tacto, pero pensaba en mi, que a veces es muy necesario  a pesar de los daños colaterales que esto suponga.

Respeto las decisiones, me callo y aguanto, y sigo con mis pasos, con mi estabilidad emocional y con mis sueños.

La R es la vigésima primera letra del alfabeto español, la decimoctava del orden latino internacional y la decimoséptima consonante. Su nombre es femenino: la erre (plural erres). Representa un sonido consonante sonante, oral, vibrante y simple.


Russian Red - I hate you but I love you 
Deshaciéndonos de emociones, con poca agilidad para manejar el teclado y dejar cuatro frases con cierto sentido. Así empezamos el lunes, después de un fin de semana lleno de propuestas, de encuentros, de interacciones ...

Relleno el post de hoy con un par de fotos, estas  ocho líneas y una propuesta musical. No me da para más, no estoy ágil.

The Vaccines - Post Break - Up Sex
Las once…. qué lento pasa el tiempo!. Tic, tac, tic, tac … Intento no mirar relojes, no pensar en horas, dejar que las agujas sigan su curso, a su ritmo, como tiene que ser … pero no, el tiempo se ralentiza, parece que deja de pasar, que se ha dado un respiro, que también es un “indignado” más, y se para, o va más lento de lo habitual.

Tic, tac, tic, tac …

Dos horas, una eternidad. No lo domino, ni mando, ni dirijo, me revelo y me entretengo con el lápiz, dibujo sin sentido, me levanto, salgo a la calle, a airearme, a respirar un poco, a aparentar que el tiempo me importa menos, a engañarle a ver si así vuelve a su ritmo habitual …

El día es fresco, me muevo ligera por el ajetreo de la calle, en un viernes que no es cualquiera …

Tic, tac, tic, tac

Le hemos puesto más años a nuestras vidas. Es hora de poner más vida a nuestros años (Alex Jaddad)

Pues con esta frase empiezo este post y me la voy a grabar fuerte, fuerte o, por lo menos, si literalmente no me la grabo si que voy a intentar recordármela muchas veces. Me vienen a la cabeza personas… a las que debería repetírsela, bueno, estoy pensando en una. Pero quién le dice a un hombre entrado en años, con una separación a cuestas no asumida, con un problema de adicción y con poca capacidad de superación, más los achaques que inevitablemente van pegados a su edad, que viva, que disfrute, que se alegre por ello … 

Pues yo ya no soy capaz, no puedo contagiarle nada, no puedo ponerme en su lugar, sólo puedo expresarme desde el mío. Así que he desistido. Dejaremos que pase por estos años que le quedan de la mejor manera que él crea.

Los estados de ánimo deberían poder contagiarse, ¿no?, o es una ilusión …

Para mi perro

Mi perro es especial, lo es porque tiene una habilidad innata, gustar hasta a quien no le gustan los perros. Es un salado, agradecido y un mimoso. Es muy hábil en las relaciones sociales, consigue apaciguar los ánimos, cambiar el rictus de la cara de las personas, insuflar ternura, provocar sensaciones …

Se lo rifan, la gente me pregunta por él, me expresa sus deseos de compartir unas horas de paseo con mi can, de quedárselo algunos días, incluso, la palabra “rapto” ha aparecido en algunas conversaciones (aquí es cuando empiezo a temblar).

Mi perro es un crack.

Pero entre tanto halago, YO, su dueña, soy quien le da de comer, de beber, quien le saca a dar grandes paseos. YO aparezco en muchas ocasiones como su prolongación. Incluso mi segundo nombre es el de mi perro, así me conoce mucha gente, así firmo muchos emails.

Estoy empezando a preocuparme – cabrearme – interrogarme. ¿La gente quedará conmigo por mi perro o por mi?, ¿los niños, sobrinos … querrán verme a mi o a mi perro?, ¿se acordarán de mi o de mi perro?, ¿mis amigas, amantes, ex, pseudonovias, familia querrán estar conmigo o con mi perro?.

Y así estoy, interrogándome. Algo de su carácter se lo habré pegado yo, ¿no?, o ¿me lo estará pegando él?. 


Hay gente fantástica a la que se conoce en mal momento y gente que es fantástica porque se la conoce en el momento adecuado
No tengo ni idea de cómo se hace, pero no consigo olvidar y, eso, me enfada, me desgasta. ¿Cómo se puede olvidar aquello que no se quiere olvidar?, ¿me lo puede explicar alguien?, porque yo estoy muy perdida.
Hace una noche preciosa, de esas que invitan a disfrutarla y perderse por las calles...

Me pierdo un rato, por unas horas ... en la vorágine, de esta noche, de calor, con estrellas ... sin brillo

Hace tiempo que imagino historias, bueno, siempre lo he hecho. Suelo ponerme en la mejor de las situaciones y a partir de ahí dibujo diferentes viñetas. Las elaboro, con más o menos prisa, las enlazo, les  voy dando el perfil y la forma que deseo … hasta que las termino.

Siempre tienen un final feliz…………. mis historias. Nunca podría imaginarme algo oscuro y de final incierto, esas, las que yo creo en mi cabeza, siempre acaban bien. Más tarde, cuando despierto y salgo de ese cuento imaginario me topo con una realidad que, en ocasiones, apenas sí tienen algo que ver con las viñetas que dibujo.

No tengo reflexión para esto que escribo, y si la tengo la obvio y paso a dibujar la siguiente historia. ¿Cómo?, olvidando la anterior. Cuando el tiempo pasa y la distancia surge como un gran muro, indestructible, es tan fácil olvidar…se, te ...

Nina Simone - Feeling Good
Pienso, en cada conversación, en cada encuentro, las personas que me rodean, sus palabras. Algunas las entiendo e incluso las comparto, muchas veces aunque las hago mías me cuesta un mundo materializarlas. Otras, en cambio, no entran en mis esquemas.

En una de esas conversaciones con una persona X, no es que me dijese nada que yo no supiese, pero era tal su seguridad. Percibía su convicción, veía su proceso, como de ser una persona que no valoraba su yo , su independencia, que sus objetivos no eran los suyos, sino los de los demás, había pasado a ser una persona convencida de que para que su crecimiento personal y su felicidad fuese pleno era necesario hacer cosas para ella y por ella, vivir su vida y no la de los demás. Su felicidad no dependía exclusivamente de lo que diese a los demás, se basaba en la suya propia, en lo que quería para si.


"En esta vida hay que morir varias veces para después renacer. Y las crisis, aunque atemorizan, nos sirven para cancelar una época e inaugurar otra", Eugenio Trías.

PERSONAL BELONGINGS - Clocks 
Inicio de día raro, con el estómago hecho un pequeño nudo. Estampa desagradable la que me he encontrado en mi periplo habitual hacia el trabajo. El infortunio, el destino, como quiera que se llame se ha llevado por delante a una persona y la visión de ese cuerpo inerte, tapado y sangrante, ha provocado el nudo, que poco a poco se va deshaciendo.

Me rehago, porque si de algo somos capaces es de borrar de nuestra mente aquello que nos provoca una reacción incómoda.

En realidad, mi despertar ha sido dulce, agradable (aunque mi perro no haya movido la cola cuando he abierto la puerta de mi habitación, cosa poco habitual, porque a el sí que le desborda la alegría con sólo intuirme). Me costó dormir, lo confieso recurrí a unas pastillitas mágicas que me hunden en el más profundo de los sueños, pero me he despertado con unas bonitas palabras, me ha gustado leer lo que he encontrado, no porque haga las cosas esperando respuesta, si no, hace tiempo que hubiese dejado de hacer “tantas” cosas, más bien es porque me resulta  agradable saber que algo que expresas le hace sentir bien a alguien. Eso es bonito, ¿no?.

En la foto de hoy, detrás de tanta estructura cruzada aparece una luz, clara, inequívoca…

Sigo pensando en lo de mi perro, ¿que mosca le habrá picado hoy…? 

(Ya noy hay más cuenta hacia delante, se acabó eso de Día ...)