Las luces ya en la noche oscura, las sombras de personas anónimas, con vidas similares, diferentes ... con otras vidas. Desde la inconsciencia, en este tejado de mi hogar provisional, observo perfiles que van de un lado a otro, a veces con compañía, otras, en la soledad más absoluta.

No descubro nada, sólo imagino vidas, me transporto con mi pensamiento hacia ellas, las moldeo a mi gusto, casi siempre dramáticas, abandonadas a una suerte imaginaria, tristes, solitarias ...

Se apaga el cigarrillo inédito que reposa en mis labios, mientras suena la música, susurrante, lenta ( "Lonely Hands", Angus & Julia Stone) y de fondo, las campanas anuncian una nueva hora, una menos, una más. No es tristeza lo que empaña estos minutos, es la soledad de los tejados, de la ciudad que se funde con la noche, de las casas sin luces, las frías, en las que no anidan sensaciones, en las que no hay conversación, ni una caricia, ni una mirada complice ... ("Old Friend", Angus & Julia Stone).

Tiemblo, el frío es más intenso, entra por cada rincón, congela lo que toca, reniega del calor, de la mano, de su fuego, de la intensidad de las cosas, de la piel, del sentimiento, se niega a descubrir, huye de lo intenso, reniega de la pasión ....

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